lunes, 11 de diciembre de 2017

Friki Navidad



Se acercan las fiestas de Navidad y Año Nuevo. Ya se sabe, reuniones familiares, vacaciones para los estudiantes, fiesta y jolgorio en general (a veces casi por obligación, lo que personalmente me repatea bastante, pero bueno). Acompañado en este lado del Ecuador de frío, mal tiempo y ganas de estar en casita... Todo ello puede hacer que el friki que llevamos dentro se aburra soberanamente... a no ser que ganemos la tirada de iniciativa, claro, y convirtamos nuestras aburridas navidades en unas frikinavidades como Gigax manda. 

Así que apuntate algunos consejos frki de mis entretelas: 

Pon motivos frikis en el árbol de navidad. ¿Qué hay más navideño que una estrella en lo alto del árbol? ¿Y acaso la Estrella de la Muerte de Star Wars no es, como su nombre indica, una estrella? 

Cambia algunas figuras del belén. Siguiendo la misma lógica de antes, un mago es un mago, así que siempre se pueden cambiar las tristes figuras de Melchor, Gaspar y Baltasar por otras más chulas, o en pose más molona... Y entre el batiburrillo de figuras del belén cabe de todo, hasta una horda de orcos despistados camino a Moria. 

Convence a la familia para jugar a un juego de mesa de los tuyos. ¿Qué más navideño que la familia reunida pasando la tarde jugando a un juego de mesa. Esta navidad sustituye el clásico Monopoly, Parchís o Cluedo por un Catán, un Carcassonne, un Firefly o, si ya los tienes un poco viciados, un Arkham Horror. 

Inicia a los más jóvenes al rol. Los padres te agradecerán que distraigas a sus pequeñuelos. Aprovecha para iniciarles en el rol. Elige un juego infantil (que empieza a haberlos, como Pequeños detectives de Monstruos o Magissa) o censura un poco uno de los tuyos. Si un progenitor preocupado por tu mala fama te pregunta que qué hacéis, esconde rápidamente dados y manual y dile muy serio que les estás haciendo un cuento interactivo, en el que ellos participan... Así se marcharán satisfechos sin indagar mucho más... mientras tú, perversamente, vas creando nuevos aficionados... 

Inicia a los más mayores a los juegos frikis de cartas. Aunque ha habido experimentos muy interesantes de jugar a rol con tercera edad (que, si tienen la cabeza clara, lo pillan enseguida, pues crecieron en un mundo menos audiovisual que el nuestro) lo ideal es jugar con ellos a juegos de cartas “de niños” junto con sus nietos. Las cartas es un medio en el que se sienten seguros, y su mente analítica puede convertirlos en excelentes jugadores de juegos frikis... Incluso alguno he llegado a ver, con el tiempo, en los torneos de Magic dándolo todo... 

Sigue la entrañable tradición de la peli de Navidad... pero actualízala a clásicos en color, en lugar de visionar por enésima vez el “Qué bello es vivir” de cada año... Pon “Jungla de cristal” (que, recordémoslo, transcurre en una fiesta navideña de empresa) o “Pesadilla antes de Navidad”, o incluso "Rare Exports" y ya verás como la familia te agradece el cambio, 

No te olvides de reivindicar tu fama de friki de la familia soltando coletillas y frases del estilo de desear “que la fuerza te acompañe” a la tía Eufemia cuando vaya camino del baño, que ya sabemos todos que tiene restreñimiento crónico os que vayan al lavabo; afirmando “que la navidad es poderosa hoy en esta casa”; que “no hay sólo mortifagos y buenas personas, pues todos tenemos luz y oscuridad en nuestro corazón”; que hay que allanar las diferencias por que “aunque tú seas DC y yo MARVEL existen los crossovers; o que los Reyes Magos llegaron diez días tarde a Belén porque "un mago no llega pronto ni tarde, sino siempre en el momento justo"... 

Haz concurso friki musical. Por música de series y películas emblemáticas y que la gente trate de adivinar cual es. Con tantos remakes que hacen hoy en día acertarán más de los que te imaginas... 

Aprovecha los horarios raros de entre fiestas: Al día siguiente de la comilona la gente se levanta tarde y muchas veces hace un desayuno comida. Reniega de anglicismos y niégate a llamarlo brunch: llámalo segundo desayuno hobbit. 

Aprovecha que lo friki está de moda. Para evitar los silencios incómodos en las comidas familiares (con gente que al igual sólo ves una o dos veces al año) date el gustazo de sacar el tema de una serie de las que te gustan: Juego de Tronos, Big Bang Theory... ¡Ya verás como al menos la mitad de la mesa sabe de lo que hablas y se entabla una animada (y absolutamente friki) conversación sobre las salidas de Sheldon y las maquiavélicas conspiraciones de los Lannister 

 Regala (te) rol. Quítate la espinita de que nunca lograste convencer a tus padres de que te regalaran “esos juegos tan raros” de rol. Ahora que tienes dinero (y unos años más) regalate a tí mismo todo el rol que quieras... y aconseja a tus sobrinos (que, recordémoslo, los has ido aleccionando) sobre cómo deben invertir el dinero que les dan para que se compren lo que quieran... 

Convierte el tradicional brindis en un discurso friki. A ver, que no se trata de soltar en la mesa el discurso de Aragorn en el Retorno del Rey (ya sabes, lo de "Veo en vuestros ojos el mismo miedo que encogería mi propio corazón. Pudiera llegar el día en el que valor de los hombres decayera en que olvidáramos a nuestros compañeros y se rompieran los lazos de nuestra comunidad, pero hoy no es ese día..." etc) pero lo friki viene de antiguo. Suelta (completo o en parte) el brindis de los capigorreros del siglo XVII (los estudiantes pícaros o tunos) que te reirán la gracia... Y de paso sueltas una fricada castiza, en lugar de tanta referencia anglosajona:

 ¿Estamos todos? 
Estamos. 
Y cual caballeros 
cumplimos 
y a las mujeres 
amamos 
pues entonces..
 ¡bebamos! ¡bebamos! ¡bebamos! 
¿Bebió nuestro padre Adán? 
Bebió. 
¿Bebió nuestra madre Eva? 
¡Uf! ¡Cuan borracha era! 
¡Ah! Cual líquido infernal que te crías entre matas y al hombre más cabal hiciste a gatas.
 ¡Ah! Sangre de cristo cuanto ha que no te he visto y ahora que te veo.. ¡lingotazo que te arreo!
 Por ellas , las más bellas, por las del culo ancho y el cuello estrecho. 
Por las que nos brindan sus labios desinteresadamente aunque estén llenas de telarañas, 
por ellas, ¿por las mujeres? 
No . Por las botellas. 
Si Dios borrachos nos mantiene 
Será porque nos conviene 
Hágase su voluntad 
Cuando Dios llamó a Gavino ,
 no dijo Gavino ven, 
sino ¡Venga Vino! 
Antes que no nos conocíamos 
Bebíamos 
Ahora que nos conocemos 
Bebamos hasta que no nos conozcamos 
y de culo nos caigamos. 
Ni arriba, ni abajo, ni al centro, ¡¡Arriba y para dentro!! 


¡Y pasad unas felices frikifiestas, que os lo merecéis, leñe!